Sí, en casi todos los casos, un almacén necesita una licencia de actividad, requiere de una autorización para poder funcionar como almacén. Esta autorización se tramitará en el Ayuntamiento correspondiente y, habitualmente, no será necesaria una licencia de actividad, bastará con una comunicación previa para poder funcionar como almacén.
La confusión es debida al uso del almacén, pues en todos los casos se utilizar para guardar cosas. Es su vinculación, o no, con una actividad económica el factor decisivo para comprender si necesitará o no se exigirá una autorización para funcionar.
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Qué es una licencia de actividad
La licencia de actividad es el documento legal que certifica que un establecimiento es adecuado para el desarrollo de una determinada actividad comercial. Esta licencia debe renovarse cuando se cambia la actividad comercial del negocio, o se altera de forma considerable la estructura anterior del inmueble.
Desde la ley 12/2012, de 26 de diciembre, de medidas urgentes de liberalización del comercio y de determinados servicios, desde el año 2013, basta con presentar una comunicación previa, o una declaración responsable, al Ayuntamiento para abrir un negocio. Desde el día que presentamos la documentación ya podemos abrir el negocio, y por eso también se le conoce como «licencia exprés».
Licencia de actividad. Tipos de actividades
Todas las comunidades autónomas de España comparten reglamentos similares, que desarrollan la aplicación de la ley estatal de rango superior. Habitualmente el tipo de actividad empresarial, para pedir una licencia de actividad, se categoriza entre:
- Actividades inocuas. Si no tenemos que realizar ningún tipo de obra, podemos iniciar la actividad empresarial al presentar la documentación correspondiente al Ayuntamiento. Pero, aunque la actividad sea considerada inocua, sí será necesario elaborar un proyecto de actividad que esté hecho por un técnico competente.
- Actividades de incidencia ambiental. Las actividades objeto de incidencia ambiental suelen ser actividades industriales, y se considera que pueden perjudicar al medio ambiente. Por este motivo, además de una comunicación previa al Ayuntamiento, también requieren de una declaración de incidencia ambiental, que se presenta al órgano autonómico que tenga las competencias.
- Espectáculos públicos y actividades recreativas. La regulación de este tipo de actividad es la que más difiere entre comunidades autónomas e, incluso entre municipios. Engloba a las viviendas de uso turístico, a las terrazas de los bares o a los negocios de hostelería.
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¿Un almacén es una actividad?
Existen muchos tipos de almacenes y, para ahorrar tiempo y dinero en trámites y tasas, la popular picaresca española está muy presente. Lo fundamental es advertir que casi todos los almacenes están vinculados con alguna actividad de tipo comercial o industrial.
Es posible que confundamos el uso del almacén que aparece en la Dirección General del Catastro, con el uso que le otorgamos al mismo almacén en el Código Técnico de la Edificación (CTE). Son categorías distintas y no tienen necesariamente que coincidir.
Tipos de almacén según licencia de actividad
Trastero de una vivienda
Es el único tipo de almacén que no necesita ni licencia de actividad ni comunicación previa. Una vivienda tampoco necesita ninguna licencia de actividad, sólo una licencia de primera ocupación.
Para estar exento de la licencia de actividad, este tipo de trastero siempre debe estar vinculada a una vivienda, o un bloque de viviendas. Y debe utilizarse para guardar los objetos propios de una vivienda, no para almacenar productos inflamables o tóxicos que son peligrosos, y tampoco como espacio para generar ruido y vibraciones por encima de lo normal.
Trastero para alquilar
Los trasteros de alquiler, aunque sean para almacenar los mismos enseres que guardaríamos en el trastero de una vivienda si lo tuviéramos, es una actividad empresarial. Por este motivo debe cumplir con todas las exigencias legales sobre protección contra posibles incendios, seguridad y salud en el trabajo.
Aunque un trastero para alquilar se ubique en los bajos de una vivienda, continúa siendo un negocio, y por lo tanto requiere de licencia de actividad. Aunque se encuentre en un edificio de viviendas, si está disponible para el alquiler es una actividad empresarial.
Almacenes rurales
Este tipo de almacén suele ubicarse en parcelas del medio rural, no en suelo industrial o para uso residencial. Los almacenes rurales se utilizan para guardar aperos de labranza, cobertizos, galpones… y la cuestión es si están, o no están vinculados con una vivienda.
Si el almacén rural está vinculado con una vivienda, se puede considerar que es el trastero de la casa. Por lo tanto, es parte de la vivienda, no constituye una actividad y no es necesario tramitar la licencia de actividad.
En cambio, si el almacén rural es una nave o un cobertizo exento, sin ninguna vivienda cerca, sí podría considerarse que forma parte de una actividad, agrícola. En particular, si se almacenan sustancias peligrosas, no relacionadas con el medio rural, o forma parte de una actividad económica, requiere comunicar la actividad.
Almacenes de locales comerciales
Casi todos los locales comerciales tienen algún tipo de almacén: para guardar un stock físico de los productos a la venta, para ofrecer más modelos y tallas de un mismo producto aunque no estén expuestas todas las variantes, etcétera.
A nivel urbanístico el almacén del local comercial forma parte del propio local, y por tanto la licencia de actividad debe tramitarse conjuntamente. Si por ejemplo se amplía el local comercial añadiéndole un almacén, esté o no exento, forma parte del propio negocio y la licencia de actividad debe tramitarse conjuntamente.
Almacenes exentos
Los almacenes exentos suelen considerarse, en la mayoría de los casos, como almacenes de uso industrial. El uso industrial no consiste sólo en la transformación de materias primas, también el almacenaje de las materias primas o del resultado de la fabricación es parte del propio proceso industrial.
Trastero en un local comercial o en una vivienda vacía
Si tienes un local comercial, o una oficina de trabajo, y la utilizas como trastero, nadie tendrá ningún inconveniente. Pero, si utilizas el local comercial para almacenar mercancía vinculada con una actividad comercial, es necesario declarar el uso del almacén.
En cambio, si tienes una vivienda vacía, una segunda vivienda, y quieres utilizarla como trastero, ninguna normativa obliga a solicitar una licencia de actividad.